Seguro que ya has oído hablar de él. Lo aprueba el gobierno de forma anual, y lleva prácticamente estancado desde el año 2011. Pero ¿sabes en qué te puede afectar?
El Salario Mínimo Interprofesional (SMI) aumentó históricamente un 8% para el 2017, quedando en 707,60€, frente a los 655,20€ del 2016. Como bien lo indica su nombre, la utilidad principal del SMI es garantizar una remuneración mínima por los servicios prestados por los trabajadores. En España todavía queda alguna actividad que no esté enmarcada en un Convenio Colectivo que regule los salarios, por lo que en las empresas que no tengan convenio, el SMI sería el salario base de referencia.
Si bien la mayoría de los convenios colectivos fijan salarios que quedan por encima de estos mínimos, el SMI también sirve de referencia para fijar ciertos baremos, como puede ser el importe de los embargos salariales. En este caso, el importe a embargar se calcula de la siguiente manera:
- Es inembargable el salario que no exceda del salario mínimo interprofesional (los primeros 707,60€ del sueldo)
- Para la primera cuantía adicional hasta la que suponga el importe del doble del salario mínimo interprofesional, el embargo será del 30 % (entre 707,61€ y 1.415,20€) .
- Para la cuantía adicional hasta el importe equivalente a un tercer salario mínimo interprofesional, el embargo será del 50 % (entre 1.415,21€ y 2.122,80€).
- Para la cuantía adicional hasta el importe equivalente a un cuarto salario mínimo interprofesional, el embargo salarial será del 60 % (entre 2.122,81€ y 2.830,40€) .
- Para la cuantía adicional hasta el importe equivalente a un quinto salario mínimo interprofesional, el embargo salarial será del 75 % (entre 2.830,41€ y 3.538,00€).
- Para cualquier cantidad que exceda de la anterior cuantía, el 90 %
Por lo que la aprobación de la subida del SMI implica de que en caso de que tengas un embargo, probablemente el importe mensual que te retengan sea inferior al del 2016.
Por otra parte, el SMI también se suele tener en cuenta como referencia para la atribución de viviendas sociales, aunque tanto en atribución de subvenciones, como de becas o ayudas públicas, el indicador de referencia suele ser el IPREM.